Cada 26 de abril, el Día de la Visibilidad Lésbica, puro orgullo en cada historia que nos convoca a algo más grande que un festejo: nos llama a reconocer, abrazar y respetar la existencia, diversidad y dignidad de las mujeres lesbianas en México y el mundo. Un recordatorio de que verlas, escucharlas y garantizar sus derechos no es un acto de buena voluntad, es un acto de justicia.
Este espacio de reflexión, celebración y denuncia es posible gracias a AHF Latinoamérica y el Caribe, organización que además ofrece servicios gratuitos de diagnóstico y tratamiento para Infecciones de Transmisión Sexual. Conoce más en ahflatamycaribe.org.
Un país donde las cifras hablan… pero la visibilidad aún falta
Según la Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y de Género ENDISEG 2021, alrededor del 10.6% de las personas LGBTIQ+ en México se identifican con orgullo como lesbianas. Eso equivale a cerca de 490,000 mujeres que, cada día, se enfrentan a estereotipos, discriminación, y a un sistema que apenas comienza a reconocerlas.
Pero los números también revelan ausencias: faltan políticas públicas específicas, falta acceso a salud integral, falta representación en medios y, sobre todo, falta un respeto genuino a sus vivencias.
Invisibilidad: la forma más silenciosa de la violencia
Que esta parte de la comunidad sea visible sigue siendo uno de los principales retos. Muchas lesbianas viven sus amores, luchas y triunfos en silencio, ocultas tras prejuicios familiares, laborales o sociales, lejos del orgullo. Esta invisibilidad no sólo niega su existencia: perpetúa desigualdades que impactan directamente en su salud mental, sus oportunidades laborales y su derecho a vivir plenamente.
Además, la discriminación tiene consecuencias reales: exclusión social, falta de acceso a servicios médicos sin prejuicios, violencia simbólica y, en demasiados casos, violencia física.
¿Qué necesitamos para cambiarlo?
El Día de la Visibilidad Lésbica no es solo una fecha para ondear banderas: es un llamado a la acción.
- Educación inclusiva: Desde las aulas hasta los medios, necesitamos más representación y menos estereotipos.
- Salud con dignidad: Formación a profesionales de la salud para atender a mujeres lesbianas sin prejuicios.
- Datos específicos: Políticas públicas basadas en estadísticas que contemplen las realidades lésbicas.
- Espacios seguros: Lugares donde amar, ser, y existir no sean actos de valentía, sino derechos cotidianos.
- Campañas permanentes: No basta un solo día de visibilidad: el respeto y la representación deben ser de todos los días.
Celebrar el amor libre un acto de resistencia y de la visibilidad
Cada historia de amor entre mujeres es también una historia de resistencia. En un mundo que aún las cuestiona, ellas eligen, una y otra vez, vivir su verdad. Celebrarlas es reconocernos en una humanidad que solo florece en la diversidad.Desde este espacio impulsado por AHF Latinoamérica y el Caribe, te invitamos a ser parte activa de esta revolución del amor y el respeto. Porque visibilizar es existir, y existir con dignidad es un derecho de todes.