Salir del clóset no es solo una frase: es un acto de decisión propia, una declaración política y, muchas veces, una necesidad urgente para vivir con dignidad.
Cada 11 de octubre se conmemora el Coming Out Day o Día para Salir del Armario, una fecha nacida en Estados Unidos en 1988 como respuesta a los discursos de odio y al silenciamiento de las identidades LGBTIQ+. Hoy se ha vuelto un día internacional para celebrar la visibilidad, el orgullo y la diversidad.
Pero más allá del arcoíris en redes o los hashtags, salir del clóset también impacta directamente en la salud sexual y emocional de quienes forman parte de la comunidad.
¿Por qué es importante hablarlo?
En América Latina, el miedo al rechazo, la discriminación en consultorios o el lenguaje binario en las leyes siguen afectando la salud sexual de muchas personas de la diversidad. Desde adolescentes que no reciben educación sexual inclusiva hasta personas trans o no binarias a quienes se les niega atención si su identidad “no coincide” con la norma.
Porque cuando escondemos quiénes somos, también escondemos nuestros riesgos, necesidades y placeres. La falta de visibilidad suele derivar en miedo a buscar atención médica, dudas sobre el autocuidado y ausencia de información segura y respetuosa sobre sexualidad y prevención.
Salir del clóset puede ser liberador, pero también debe ser una decisión personal, informada y segura, sobre todo en contextos donde la discriminación y la violencia aún son moneda corriente.
Coming Out y salud sexual: una relación poderosa
Vivir abiertamente permite:
- Acceder a servicios de salud sin miedo ni prejuicio.
- Hablar sin tabúes de prácticas sexuales, prevención y placer.
- Conectar con redes de apoyo y comunidad.
- Ser escuchade y respetade en tu identidad de género y orientación.
Y por eso es tan importante que existan espacios como los de AHF Latinoamérica y el Caribe, donde puedes hacerte pruebas gratuitas de VIH, recibir acompañamiento psicológico y obtener información clara, sin juicios ni etiquetas.
Si hoy no puedes salir del clóset, está bien. No hay tiempos correctos.Si ya lo hiciste, celebra tu camino. Y si acompañas a alguien que aún duda, sé abrigo, no presión.
La salud sexual también es emocional, afectiva y política. Y empieza por poder decir “esto soy” sin miedo.
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No todos pueden salir… pero todos deberían tener acceso
El Coming Out Day no es una obligación para quienes no se sienten segurxs, pero sí es un recordatorio para gobiernos, instituciones y sociedad: las personas LGBTIQ+ existen, y sus derechos no pueden depender del silencio.
Acércate a cualquiera de las sedes de AHF Latinoamérica y el Caribe. Las puertas están abiertas y no necesitas explicar tu identidad para recibir atención. Más info en 👉 ahflatamycaribe.org Y síguenos en @2puntosero para más contenido libre de prejuicios.
